Hace poco más de diez años, en un panorama en el que la crisis económica empezaba a azotar en España, nacieron una serie de editoriales independientes que, a pesar de ser aún muy jóvenes, ya han conseguido cambiar y renovar el panorama literario de nuestro país.
En Casa de Letras te hablamos de cinco editoriales que han transformado el mundo literario en España:
Blackie Books
Esta editorial nació en 2009 en la ciudad condal y a su frente se encuentra Jan Martí.
Blackie Books es una de las responsables de que James Rhodes se haya convertido en un “fenómeno de masas” en España. “Instrumental”, la autobiografía del pianista británico se convirtió en 2015 en uno de los libros del año. Tanto que finalmente Rhodes abandonaría su Londres natal, por un Madrid en el que todo le parece maravilloso.
Al explicar cómo construyen su catálogo, aseguran que no les interesan que algo sea novedad y que, para ellos, lo nuevo no es solo lo que se acaba de crear o hacer, sino también lo que se acaba de descubrir, lo que cambia de apariencia… Y afirman que “Todo es nuevo, siempre”.
Errata Naturae
Reconocibles por unas portadas que acercan los clásicos al mundo del cómic, los libros de Errata Naturae son en su gran mayoría ensayos que han sido despojados de sus matices más solemnes y que en cambio abrazan la cultura popular, apostando por un lenguaje contemporáneo que también se plasma obras seriéfilas como “Regreso a Twin Peaks” o “Mad Men o la frágil belleza de los sueños en Madison Avenue”.
Irene Antón y Rubén Fernández son sus fundadores y aseguran que se embarcaron en la aventura del mundo editorial sin tener “ni idea” de lo que implicaba crearuna editorial o de cómo convertirse en emprendedores. Pero, tras lanzar sus primeros libros en 2008, y pagar el precio de la inexperiencia, hoy se han convertido en una de las nuevas editoriales más respetadas de nuestro país.
Libros del Asteroide
Esta editorial independiente fue fundada en Barcelona en el año 2005 por Luis Solano. Desde su creación, ha publicado más de un centenar de libros, en un trabajo que fue reconocido en 2008 con el “Premio a la Mejor Labor Editorial Cultural” concedido por el Ministerio de Cultura.
La editorial apuesta por obras fundamentales de la literatura universal de los últimos setenta y cinco años que bien no hayan sido publicadas antes en español o que se encuentren descatalogadas.
Luis Solano afirma que la editorial nace con la “voluntad de compartir libros que me gustaban, que podían tener lectores en España pero que no había editoriales que los publicaran. El nombre tiene que ver con el tamaño de de estos cuerpos celestes más pequeños (los asteroides) y con tienen una libertad de órbita que les permite ir por determinados sitios por los que otros cuerpos celestes mucho más pesados no pueden ir”.
Periférica
Julián Rodríguez y Paca Flores son los creadores de Periférica, una pequeña editorial extremeña que nació a finales de los años 90 con la intención de especializarse en autores latinoamericanos y portugueses, además de recuperar textos clásicos que hubiesen caído en el olvido.
Ha luchado por recuperar novelas escritas por mujeres, dando una voz propia a las más olvidadas y en definitiva, se ha empeñado en navegar por esas aguas poco transitadas de las que huyen las grandes editoriales.
Impedimenta
Fundada en el año 2007 en Madrid por Enrique Redel, esta editorial aspira a recuperar y redescubrir las obras literarias esenciales para poder disfrutar de nuestro largo camino como lectores: obras que se lean, que se disfruten y que se guarden.
Impedimenta nace, pues, para recuperar clásicos incontestables, pero también para “fabricar” clásicos modernos, planteando un diálogo entre lo antiguo y lo moderno. Como prueba, le debemos que autores como Penelope Fitzgerald, Iris Murdoch o Muriel Spark hayan llegado a nuestras manos…en un ejercicio que denominan “literatura de rescate”.
Tanto mimo ponen en la edición de cada uno de sus libros, que están convencidos de que fenómenos como el eBook acabarán por desaparecer. Como explicaba el propio Redel en una reciente entrevista, “es evidente, es un concepto obsoleto, y el libro no, lleva aguantando centenares de años y no se agota. Otra cosa es que tenga que cambiar”.
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